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Proponen resolver la deuda externa desde la perspectiva política por su polémico origen

Claudio Lozano presenta su libro ‘La deuda ilegítima’ y propone investigar a funcionarios del actual Gobierno

25 de septiembre, 2019 - 07:58

Estuvo en Mendoza el economista y politicólogo Claudio Lozano para presentar su libro La deuda ilegítima, todo un estudio que el dirigente fundador de Unidad Popular confeccionó con datos que extrajo de diferentes fuentes económicas y financieras del país y el exterior.

El Ciudadano lo entrevistó y respondió, en primera instancia, sobre dónde se inicia la deuda que pesa sobre el país y que él refleja en su libro: “Presentamos este libro y no lo hacemos por casualidad, porque en él tratamos el tema del endeudamiento, algo histórico en la República Argentina, sin solución desde mediados de la década del 70 hasta nuestros días. Se debe reconocer que tuvo un nivel de agravamiento en los últimos años y con la actual administración nacional, por lo que se transforma en una condición demasiada pesada para quienes asuman el Gobierno en diciembre”.

–¿Se puede achicar o saldar?

–Creo que lo que caracteriza a una deuda que tiene un origen absolutamente ilegítimo y espurio, por definición no tiene solución financiera. Entonces es necesario un abordaje político y jurídico. Agregando la consigna esencial que las deudas se pagan, no así las estafas.

–¿Cuál es el monto real de esa deuda?

–Hoy la deuda argentina es de alrededor de US$ 330.000 millones en cabeza del Estado nacional. Le debemos agregar US$ 13.000 millones en cabeza de los estados provinciales y una deuda muy significativa en cabeza del Banco Central. Por supuesto que existan más deudas vinculadas a distintos juicios que la Argentina tiene repartidos sobre empresas residuales y deferentes casos en organismos internacionales. Por lo tanto la deuda equivale a un año de la riqueza que genera el país, es decir al total de un PBI.

–¿En su estudio encontró aspectos raros?

–Todo este endeudamiento no lo tomó el país para ampliar la capacidad económica. Por eso, cuando uno observa que durante el gobierno de (Mauricio) Macri entraron US$ 107.000 millones, de los cuales US$ 70.000 millones se fugaron y el resto se utilizó para pagar intereses, ni siquiera capital de la deuda exterior, solo hizo que se incrementara. Ahí está el problema, por lo que considero que hay que investigar lo que ocurrió, los bancos que participaron en la colocación de la deuda y quiénes son los funcionarios que han estado al frente del Ministerio de Economía, del Banco Central y de la Secretaría de Financiamiento. Saber también si se han cumplido las normas para endeudar al Estado, qué vínculos tenían estos funcionarios con los bancos observados. Lo comento con el fiel convencimiento de que son los que sacaron el dinero del país.

–¿Será complicado saldarla?

–Hay que reducir los pagos, porque la deuda representa el 30% del total del gasto de la administración nacional. Por lo tanto, si uno no logra una reducción importante de los pagos, ciertamente el margen de acción fiscal que el Estado puede tener para recomponer determinadas partidas de ingreso para colocar dinero en la población que dinamice el mercado interno, directamente no existiría. Otra cosa a tener en cuenta es que la deuda se paga en dólares y los dólares los necesitamos para recomponer la actividad económica del país. Entonces si la deuda se lleva los dólares que generamos, los límites son precisos.
“El acuerdo con el FMI establece cuatro o cinco condiciones de política económica: reforma laboral para seguir reduciendo costos laborales. Reforma previsional, para bajar la inversión en seguridad social y tributaria basada en la expansión del IVA, achicando gastos. Reforma del Banco Central para arrebatarle la discusión de la política monetaria al próximo gobierno. Todo esto muestra una condicionalidad general sobre la política económica sobre nuestro país, que creo deberíamos todos defender”.

–En su estudio, ¿notó desigualdades de quienes pagan impuestos?

–Los ricos de la Argentina no pagan impuestos, o pagan muy poco. Hoy la alícuota más importante en Ganancias es del 35%. Por eso, fruto de las exenciones, los millonarios tiene una alícuota del 16%. Esto no significa que no haya millonarios en la Nación, los hay, por lo que una reforma tributaria que grave los sectores con capacidad contributiva, debe ser un importante objetivo. No debemos hacernos los distraídos y discutirlo de una vez por todas. En el mundo esto ya está superado, con países cuya base impositiva tiene un 50% de impuesto al patrimonio y a las Ganancias de las altas rentas. Mientras nuestro país tiene 114 mil personas que tienen un patrimonio superior al millón de dólares, 1.000 personas que tienen US$ 30 millones de patrimonio y 20 fortunas de más de US$ 1.000 millones, y no existe un impuesto al patrimonio que no les cobre nada.